Seamos honestos: el otoño es complicado. Sales de casa con el frío de la mañana, pero a mediodía el sol te recuerda que el invierno aún no ha llegado. Es la temporada del eterno «¿qué me pongo para no pasar ni frío ni calor?». Para todos aquellos que ven los abrigos como un engorro y las chaquetas como algo que siempre sobra, existe una solución que combina estilo y una funcionalidad casi mágica: el chaleco acolchado.

Esta prenda, también conocida como puffer vest, ha pasado de ser un básico de la moda de montaña a convertirse en un pilar del armario urbano. Su genialidad reside en un principio muy simple: mantiene el torso caliente, que es donde el cuerpo más necesita conservar el calor, mientras deja los brazos completamente libres. Es la capa perfecta que te da abrigo sin agobiar, permitiéndote una libertad de movimiento total.

Y no es solo una percepción nuestra. La plataforma de moda Lyst confirma que las búsquedas para «chaleco acolchado hombre» se disparan un impresionante 200% entre septiembre y noviembre cada año. Para 2025, además, la tendencia apunta a los modelos de corte cropped o ligeramente más cortos, consolidando su estatus en el streetwear. Justo ahora, a principios de septiembre, estás en el momento perfecto para hacerte con el tuyo.

¿Por qué un chaleco y no otra prenda? Las ventajas del ‘puffer vest’

Más allá de la estética, el chaleco acolchado es una prenda increíblemente inteligente. Estas son sus principales ventajas:

• Calidez estratégica: Aísla el core de tu cuerpo, que es la clave para mantener una sensación térmica confortable en todo el cuerpo.

• Libertad total: Ideal para conducir, moverte por la ciudad o simplemente no sentirte atrapado en una prenda voluminosa.

• El rey del layering: Es la pieza definitiva para crear looks por capas. Funciona visual y funcionalmente sobre casi cualquier cosa: camisetas, camisas, jerséis o sudaderas.

Cómo combinar un chaleco acolchado: 3 looks para acertar siempre

Dominar esta prenda es más fácil de lo que parece. Aquí te dejamos tres ideas infalibles que demuestran su versatilidad y responden a la gran pregunta de cómo combinar un chaleco acolchado.

1. El look streetwear con sudadera

Esta es la combinación por excelencia y un acierto seguro. Una sudadera con capucha (hoodie) de algodón grueso crea la base perfecta. Elige un chaleco de un color que contraste o complemente el de la sudadera para un impacto visual.

• Cómo crearlo: Ponte una sudadera (con o sin capucha), tu chaleco acolchado encima, unos pantalones cargo o unos vaqueros anchos y unas zapatillas de baloncesto retro. Este es el look con chaleco hombre que domina las calles.

2. El look smart-casual con jersey de punto

¿Quién dijo que el chaleco es solo para looks informales? Combinado con las prendas adecuadas, puede elevar tu estilo. Elige un chaleco plumas ligero y con un acabado menos brillante para un toque más sofisticado.

• Cómo crearlo: Un jersey de punto fino (de lana merina o cashmere) en un color neutro, unos pantalones chinos o de franela y unas botas Chelsea o unas zapatillas de piel blancas. El chaleco, en este caso, sustituye a una americana o a una chaqueta ligera.

3. El toque Gorpcore con forro polar

El gorpcore (la tendencia de llevar ropa de montaña en la ciudad) es el hábitat natural del chaleco. Aquí se busca la funcionalidad y una estética inspirada en el senderismo.

• Cómo crearlo: Una camiseta técnica o una camisa de franela, un forro polar de cremallera como capa intermedia y el chaleco acolchado como capa exterior. Combínalo con unos pantalones técnicos y unas zapatillas de trail.

El rey de la calle: El chaleco The North Face Nuptse 1996

Si hay un modelo que personifica el boom de esta prenda, es el chaleco «Retro Nuptse 1996» de The North Face. Inspirado en la icónica chaqueta de la marca, este chaleco es mucho más que una simple prenda de abrigo; es un símbolo cultural.

Su diseño boxy (cuadrado), sus paneles acolchados sobredimensionados y su tejido brillante son reconocibles al instante. Su popularidad explotó en los años 90 en la escena del hip-hop neoyorquino y, desde entonces, no ha hecho más que crecer. El chaleco The North Face es una pieza de inversión que se agota temporada tras temporada. Su corte, naturalmente más corto y cuadrado, se alinea perfectamente con la tendencia cropped que se espera para 2025, lo que demuestra su vigencia y su capacidad para definir la moda.

Conclusión: La capa inteligente que tu armario necesita

El chaleco acolchado es, sin duda, el comodín del entretiempo. Es la solución perfecta para quienes buscan funcionalidad sin sacrificar el estilo, y la respuesta a los cambios de temperatura impredecibles del otoño. Ya sea en su versión más urbana y contundente como el Nuptse o en una opción más ligera y discreta, esta prenda te permite jugar con las capas y construir looks con profundidad y personalidad.

Ahora te toca a ti. ¿Cómo prefieres llevar tu chaleco? ¿Con sudadera, jersey o te atreves con un look más técnico? ¡Te leemos en los comentarios!